Los síntomas de la leucocitosis pueden variar ampliamente, ciertos síntomas, sin embargo, pueden ocurrir sin importar cuál sea la causa de leucocitosis. Estos síntomas incluyen exceso de hematomas o sangrado, fiebre, letargo y debilidad, mareos , sudoración y desmayos. También un dolor puede presentarse en las piernas, brazos o abdomen. La leucocitosis usualmente se manifiesta por síntomas generales , pero principalmente por un aumento en la temperatura corporal (fiebre ). Otros síntomas son resultados de una enfermedad respectiva. En la sangre se miden los recuentos de leucocitos por encima de 11.000 por microlitro. Con más de 50.000 leucocitos por microlitro se llama una reacción leucemoide. Esto es una indicación de cambios tumorales o severos de infección (por ejemplo, a una tuberculosis ).
Un completo hemograma o conteo completo sanguineo a menudo se puede usarse para diagnosticar definitivamente la leucocitosis.
Un frotis de sangre periférica (PBS) puede ser necesario si los trastornos de la médula ósea son sospechosos. Estas pruebas pueden ayudar a los médicos para detectar anomalías en los leucocitos de la sangre.
Un tratamiento por lo general trata de resolver la causa. En algunos casos, como en el caso de infección, no se necesita tratamiento, ya que la leucocitosis generalmente desaparece por sí misma cuando se trata la infección, pero sino ella seguira su curso. Los esteroides, antibióticos y medicamentos para reducir los niveles sanguíneos de ácido úrico puede ayudar al tratamiento. Cuando los trastornos de la médula ósea son la causa, los trasplantes de médula ósea, transfusiones de sangre y la quimioterapia se pueden utilizar.
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